RETORNO DE LA VUELTA PASANDO POR ZARAGOZA, CON UNA DESPEDIDA

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Han sido 25 días montado en la furgo, bajando y subiendo, montando y desmontando los artefactos del stand, en 22 lugares distintos de la geografía cercana, durante la parte final del verano más caluroso de los últimos 40. Después de 25 días, y en cada montaje, esperando encuentros improvisados con gentes diversas, solo he percibido bondad y aprecio, una cierta búsqueda por parte de cada vez mas gente de lo innovador que une al sentir ecologista y unas ganas en aumento de ser parte activa de las soluciones. En lo que me toca, contento vuelvo de ver y sentir las ganas de entender más de lo que hay en relación a esas parábolas que buscando la perpendicular del sol, no solo cocinan platos.

Y es que 25 días dan pa mucho, y cuando más de 2 días completos, en suma, han transcurrido en la cabina de una furgoneta de las nuevas, surge una tecnocomplicidad entre el espacio y su usuario. Ese pequeño hábitat es donde sitúas las comida pa picar, donde das y recibes la información (desde el manos libres, el gps y la radio), acomodas la ergonomía del asiento (este ha sido con regulación de peso y amortiguación), te haces con los mandos, donde descubres utilidades y practicas habilidades de la conducción de una máquina elevada sobre el asfalto y que no coge en cualquier sitio. Y también dan las horas para pensar y reflexionar sobre lo que te rodea de a diario, lo que dejaste y lo que encontrarás, mientras aparecen trazas de los últimos comentarios o vuelven los más memorables, y entre ellos en ocasiones aparecía una cercana sonrisa cautivadora y los planes para como atraparla sin excusas..., y todo y más, mientras ves pasar o pasas por un país en la furgoneta, que no en la mochila, pero si algo parecido.

Con el gps el balance ha sido positivo desde la intensidad de uso, casi cada día un destino de montaje y un destino de alojamiento. Sin dudarlo, para llegar a los sitios sobre todo en rutas distantes, a la maquinilla sorprendente receptora satelital hay que meterle una dosis destacada de sentido común, y hay que llevar un mapa de toda la vida, en papel y a colores, lo más actual posible (yo lo olvidé y me marqué el reto de resistir sin el). También se ha dao el reencuentro con la radio, mientras por ventanas y parabrisas uno va flipando con los paisajes y las obras humanas sobre estos. Son más de 12 los campos de aerogeneradores vistos y admirados, también ha habido montañas de carbón y ese azul laminar de miles de metros cuadrados de panel solar fotovoltaico, en cubiertas y huertas energéticas. No me ha abandonao una especie de pesadez mental en relación al petróleo quemado para moverme yo y el fato haciendo terapia desde el hábito de la conducción eficiente. Y si, en la radio, tan diversa, con un par de sintonías de espanto para un librepensador, ganan las ondas con susurros de progreso, actualidad, laicidad y realidad de la buena.

De Madrid a Barcelona, cumplido el objetivo de llevar las cocinas alSol al máximo de sitios para enseñarlas, lo que son y representan, al máximo de personas, un relajo invade la cabina. No más hoteles, no más aparcamientos, no mas zonas azules, no más nuevas vistas, y si retorno a lo cotidiano y más lineal, a seguir con modestia e ilusión, participando de un mundo en transcendente cambio.

El sol ha caido sobre Zaragoza mientras me aproximo a la ciudad bajando el puertecillo de la Muela, después de dejar al toro cartelero en la penumbra entre un mar de luces rojas elevadas, que a un lado y otro de la carretera y desde las las cabezas generadoras marcan que allá se produce energía limpia y renovable (aquí unas imágenes y aquí enlace a su memorable y muy recomendable Museo del Viento). Según como lo sientas es un paso emocionante e inolvidable. Y es sin duda una llegada o salida a la ciudad aragonesa, que concentra realismo hacia la sostenibilidad, y donde descubrí 10 días antes el CUS y me pasee por ese barrio de cine bien hecho.

Todo el trayecto, toda la tarde, las emisoras de servicio social recuerdan a Labordeta, del que supe de su adiós al poco de darlo y que habia estado apareciendo en mis recuerdos por ratos. Ya cargando la furgo me dió por silbar la melodía de aquella canción que tanto influyó en mi pensamiento y activismo, ..y habrá un día en que todos.... Informado por las ondas y sus voces, coincidía mi viaje de retorno con el adiós del pueblo a un ser humano dado siempre al bien común, creando acordes y canciones, poemas y relatos y dándose a un activismo político que ha sentado cátedra. Lo que ya es sabido era noticia inmediata para mi, los directos con el lugar de la despedida final junto a las estrofas de aquella canción que sonó muchas veces en mi cassette de juventud inquieta, me han llegao a emocionar. Decenas de miles de ciudadanos mostrando su aprecio al que ya se había ido, todo en la casa del pueblo de esa ciudad del Aragón que Labordeta defendió como se defiende lo que se ama. Allá, en las montañas del Alto Aragón, sus cenizas se reencontraran con lo que sigue vivo.

No se me ocurre otra cosa que escribirle una carta al viejo profesor, que ya no podrá leer, pero aquí la dejo.

Apreciado Jose Antonio, decirte, que siento que no estés cuando más falta nos haces tu y tú ejemplo. Viajando de un sitio a otro, entre la noticia de tu adiós, aparecen las noticias de una idealizada Suecia donde un reiventado fascismo, adaptación del que tanto aborreciste, va a tomar decisiones sobre políticas de futuro. Y es que pasa en media Europa, y pronto quizás, lo mismo aquí. Y tu ya no estarás en la tribuna, lexes.

Quizás en tus últimos días ya no lo atendias o podías asimilar el acontecer humano. En EEUU del sueño Obama se fortalece lo que parecía que no podría suceder, la ultraderecha asusta con sus posibilidades. Otra vez el neofascismo, arropado por el miedo y la idiotez, hace en Francia de las suyas con los que no piensan o actúan como ellos. Y en Badalona, los amigos de aquellos de mandaste a la mierda se pasean para estimular el odio hacia el vecino pobre y diferente. Ya ves, los que se burlaban de ti, ahora, con la corrupción en sus entrañas miran para otro lado y siguen anhelando las llaves maestras de ese excitante juego que es la democracia, donde pueden jugar todos los sentires, pero donde se anhela por las mayorías que sólo ganen las ideas de personas como tú. 
Mira tu las cosas, que hasta Zapatero que no apoyó como querias al Aragón de tus cenizas, en la ONU se atreve a pedir la tasa Tobin (wiki) para los trapicheos del dinero salvaje, tanto global y tan sucio en numerosas ocasiones. Pero al mismo tiempo rinde pletesía a los señores del capital, los de la "calle del muro" garatizando recortes del gasto público y otras movidas, por el bien del neoliberarismo, que bien tendriamos que mandar  a la mierda, garatizando su llegada al lodo hasta hundirlo. Y de aquello de acabar con la pobreza, nada, llegará el 2015 y entre los ricos que irán tirando a pobres y los pobres que nunca tendrán la oportunidad de salir de sus miserias, la retorica es lo único que queda y desespera.

Todavía falta mucho para que halla un día en que todos al levantar la vista veremos una tierra que ponga Libertad, pero ves tranquilo, que llegará después de importantes batallas por la paz, el clima y la equidad. Ves a paso de buen humano con mochila, a pie, a la velocidad de las mariposas. Aunque que falta nos hará tu sabia presencia ahora que durante igual un decenio vamos a ver y a participar del cambiar tantas cosas, donde quizás vamos a perder algunos de los éxitos sociales que ayudaste a construir, donde los fantasmas tendrán castillos donde asustar a todos los posibles. Abuelo Labordeta, menos mal que nos queda tu ejemplo.

He descargao la furgoneta después de estar de bolo solar, que ya te contaré en otra ocasión y ya en casa y tirando de adsl, veo que la prensa, (no tengo DDT) se ha portado bien contigo y ahora destaca tu obra y tu adiós. En El Mundo te lanzan sus respectos y tienes un especial, y hasta ordenados tus mejores vídeos y canciones, en El País te acogen y destacan y he descubierto tus reflexiones en Público, ...ménudas lecciones, viejo profesor.

Como a los grandes personajes, aquel A la mierda dado al facherio democrático, dejó una escena memorable, a tí, a un paisano amable con nombre y apellidos para siempre recordados dirigiéndose a los que nunca brillarán por méritos propios y sólo los suyos recordaran. Aquella invitación junto con su argumentación, era la del personaje de nombre Libertad contra el personaje colectivo de nombre Intolerancia y ..que bien sonó y cuanto ayudó a avanzar. Has ganado Labordeta, tu ya le has ganado a todos en sus carreras políticas, porque has sido uno de ellos pero ejemplar y porque muchos sueñan con una despedida como la que te ha dado la gente como tú o parecida. No lo tienen fácil. Mira tu que si se ponen a igualarte, mejor iremos. Te apuntarías pues, otro tanto.Y los que te quieren van a poner al parque mas grande de Zaragoza tu nombre, también lo harán en muchos pequeños pueblos de esa tierra y hasta la canción será el himno de tu región, quizás el más bello de todos los himnos conocidos. Has ganado Labordeta, has ganado.

Gracias por tus libros, por tus discos, por tu mochila donde metiste un país entero y a muchos de sus ciudadanos, gracias por tu compromiso con el progreso de la vida y la equidad para esta, tu especie, en este emocionante planeta.

Manolo Vílchez

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